¿Hay riesgos en instalar placas solares sin ayuda profesional?

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Instalar placas solares sin ayuda

¿Hay riesgos en instalar placas solares sin ayuda profesional?

Instalar placas solares en una nave industrial o un proyecto de autoconsumo compartido en una comunidad de vecinos es siempre sinónimo de ahorro energético. Cada vez son más las ventajas del autoconsumo fotovoltaico para las empresas y, por tanto, más negocios buscan tener placas solares. Sin embargo, lo cierto es que hay riesgos en instalar placas solares sin ayuda profesional y queremos detallar todos esos problemas en este artículo.

¿Qué necesitas para instalar unas placas solares?

Hay una serie de requisitos que te van a solicitar para legalizar la instalación. Te los resumimos en este listado:

  • Una cubierta en buen estado que soporte el peso de las placas.
  • Diseño de la instalación: memoria técnica o proyecto técnico en instalaciones superiores a 10kWn.
  • Un permiso concreto para acceder y conectarte a la red siempre que tu instalación supere los 15 kWn.
  • Una licencia de obra y el abono tanto del ICIO (impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras) como de las tasas municipales.
  • La autorización administrativa correspondiente, obligatoria en instalaciones superiores a 100 kW o en AT, con carácter general.
  • La autorización ambiental y de utilidad pública, en instalaciones con potencia superior a 100 kW y/o con conexión en AT.
  • El certificado de que la obra ha terminado.
  • La autorización de explotación si la instalación supera los 10 kW.
  • El informe de la inspección inicial.
  • El registro de la instalación en la Consejería de Industria de tu comunidad autónoma.
  • El contrato de acceso de tu instalación, el de suministro de energía, el de representación y el de compensación por los excedentes.

Como has comprobado, no resulta nada fácil afrontar estos primeros pasos sin el asesoramiento adecuado de un profesional.

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Los errores de instalación más comunes

A la hora de instalar unas placas solares en el techo de un edificio de viviendas o de una nave industrial, es bastante habitual cometer errores como los siguientes.

La falta de distancia entre las filas de las placas

La distancia recomendable está marcada por las gráficas solares específicas para cada instalación. De hacerlo de forma incorrecta, la producción de energía se reduce de forma considerable, por lo que no ofrece los resultados esperados.

Los errores en el anclaje

Todo dependerá del tipo de superficie, de su impermeabilización y de los materiales que vayan a emplearse para fijar las placas. Apostar por un estándar sin comprobar estos datos previamente conlleva que las placas queden sueltas y pierdan eficacia.

Un ángulo erróneo

El estudio del ángulo correcto ha de ser elaborado por un experto. En caso contrario, la mayor o menor inclinación hace que no se capte correctamente la energía generada. Sin duda, ello incidirá en el rendimiento de las placas.

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El uso de herramientas poco apropiadas

Esta práctica provoca que las placas sufran erosiones e incluso que se ponga en riesgo la integridad de quien acomete la instalación. Además, el desgaste del equipo es mayor y pueden producirse errores en las conexiones.

Unas protecciones mal instaladas

Los protectores no son embellecedores, sino piezas de vital importancia para reducir el riesgo de descargas eléctricas. Es más, puede haber peligro de muerte en caso de no colocarse correctamente.

No comprobar si existe un electrodo de tierra

Otro de los grandes problemas de instalar placas solares sin ayuda tiene que ver con el electrodo de tierra. Lo habitual en España es que no exista. Esta situación conlleva que el sistema no tenga la conexión necesaria para descargar el exceso de energía recibida, lo que provoca graves averías en las placas.

Un mal aprovechamiento de los MPPT

Estos dispositivos permiten obtener la máxima potencia del sistema en función de las condiciones cambiantes de sombra y temperatura. En este sentido, resulta fundamental instalarlos exclusivamente en las áreas necesarias y no por defecto.

Cálculos no apropiados del fusible y del conductor

Recuerda que la placa estará expuesta a la luz solar durante varias horas al día. Si no tienes en cuenta los aislamientos de los conductores, cuando uno de ellos sufra un cortocircuito, el resto experimentará la misma circunstancia y la instalación quedará inutilizada.

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La instalación no se pone en marcha

Si no tienes la capacitación adecuada, es bastante probable que instales las placas y que no generen energía. La puesta en marcha es el paso final al proceso, pero hay que saber realizarla. Ser instalador y supervisor al mismo tiempo no es buena idea.

Riesgo y pérdida de dinero

Teniendo en cuenta que las placas solares que se compran en un kit de instalación suelen ser más costosas que las que se pagan mensualmente, la idea de instalarlas por tu cuenta no es nada positiva.

Tanto por los peligros como por la burocracia que conlleva (y las sanciones que podrías recibir como propietario de la nave o como integrante de una comunidad de vecinos), instalar placas solares sin ayuda es una mala idea. Lo más adecuado es que confíes en expertos en la materia.

Recuérdalo, instalar placas solares es siempre una buena idea, pero no tanto hacerlo como si se tratara de una sencilla tarea de bricolaje. A buen seguro, el repaso a los errores anteriores te ayudará a tomar la mejor decisión al respecto de tu futura instalación. Apuesta por la seguridad y, sobre todo, por la tranquilidad y la confianza que transmiten unas placas solares eficaces y destinadas a generar energía sostenible para una comunidad de vecinos o una nave industrial contando con la colaboración de una empresa fotovoltaica.